Diagnóstico de la situación


La población antioqueña depende tanto de los servicios de los ecosistemas como de sus productos, pero esta dependencia es vulnerable. Los bosques de Antioquia presentan una de las tasas de deforestación más altas de Latinoamérica. Con menos del 35% de cobertura actual de bosques y una tasa de deforestación de 25 mil ha/año (~ 0.4% del área total), en 90 años Antioquia podría perder todos sus bosques.

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Esta deforestación paulatina, agravada por los cambios climáticos, tiene efectos socio-ambientales (pérdida y/o deterioro de los servicios ecosistémicos, productos) que generan una gran inestabilidad socio-económica en la región (migraciones a la ciudad, y perdida de suelo por erosión). Inestabilidad, que hoy en día se refleja en los niveles de pobreza de los campesinos que se ve agravado por el difícil acceso al mercado y las escasas oportunidades incluyentes que promuevan el aprovechamiento sustentable de los recursos. Mejorar los ingresos de los campesinos con actividades sustentables, garantizando la comercialización, gracias a los cerca de 500 mil visitantes que cada año recibe el Parque, repercutirá en mejores perspectivas para la conservación de los bosques andinos.